Definición
La violencia doméstica se define por el hecho de que uno de los miembros de una pareja* trata de ganar poder sobre el otro por cualquier medio necesario[1 ] y puede producirse en una relación conyugal, extramatrimonial o romántica a cualquier edad[2].
La violencia doméstica no es el resultado de una pérdida de control. Por el contrario, es el medio elegido para dominar a alguien y afirmar el poder sobre él.[3] Es una elección, porque los hombres que se comportan de forma violenta no lo hacen en todos los ámbitos de su vida, en todas las situaciones ni las 24 horas del día. Suelen optar por soluciones no violentas, incluso cuando se enfrentan a acontecimientos emocionalmente intensos. Así que su violencia no tiene que ver con quiénes son como individuos, sino con lo que deciden hacer. [4]
*La violencia doméstica puede darse en todas las parejas, ya sean heterosexuales u homosexuales (gays o lesbianas), e independientemente de la identidad de género. Cada miembro de la pareja puede vivir en una relación violenta. Sin embargo, dado que el 80%[5 ] de las víctimas de la violencia doméstica en Canadá son mujeres, y dado que somos un centro de acogida para mujeres, hemos optado por abordar el problema de la violencia doméstica desde el ángulo de la violencia perpetrada por hombres contra mujeres. El modelo sigue siendo el mismo para todas las parejas.
[1] Regroupement des maisons pour femmes victimes de violence conjugale, Comment se manifeste-t-elle, http://maisons-femmes.qc.ca/?page_id=182[2 ] Gouvernement du Québec (1995), Politique d’intervention en matière de violence conjugale: Prévenir, dépister, contrer la violence conjugale. Québec: Comité interministerial de coordinación en materia de violencia conyugal y familiar, p.23[3]Gobierno de Québec (1995). Política de intervención contra la violencia doméstica: prevenir, detectar y combatir la violencia doméstica. Quebec: Comité Interministerial de Coordinación contra la Violencia Doméstica, p.23[4]Tabla de concertación en violencia conyugal y agresión de carácter sexual de Laval (2011), Romper el silencio, Laval, p.16[5 ] Maire Sinha (2013), Artículo de Juristat – Family Violence in Canada: A Statistical Profile 2011, Statistics Canada, p. 3
El ciclo de la violencia doméstica
- Para el agresor: arrebatos de ira, silencios pesados, tono agresivo, gestos rápidos, miradas amenazadoras, etc.
- Para la víctima: intenta rebajar la tensión, vigila sus acciones y palabras, se ajusta a las necesidades del agresor, se centra en su estado de ánimo: aumentan los sentimientos de ansiedad e impotencia de la víctima.
- Para el agresor: agresión verbal, psicológica, física, sexual. Suele decir que en ese momento «pierde el control». De hecho, hace falta poder. Quiere dominar a la víctima y utilizará cualquier medio para conseguirlo.
- Para la víctima: se siente humillada, triste, con un sentimiento de injusticia.
- Para el agresor: minimiza la gravedad de la agresión. Habla de sus problemas con el alcohol, las drogas, etc. Él replicó que su mujer estaba exagerando o que no tenía por qué provocarle.
- Para la víctima: Frente a sus justificaciones, olvida su propia rabia por la agresión y se considera responsable del comportamiento del agresor. Se dice a sí misma que cambiando sus propias actitudes y comportamientos, la violencia desaparecerá. Vive en la inseguridad, adaptándose a las exigencias del agresor. Se ve a sí misma como incompetente en su relación y en su vida personal.
- Para el agresor: hace de todo para ser perdonado y minimizar la gravedad de la situación: promete cambiar, no volver a hacerlo, ir a terapia, ofrece regalos, etc.
- Para la víctima: Tiene mucha esperanza, porque se reencuentra con el hombre al que ama. Quiere darle otra oportunidad. Pueden tender a olvidar, y a veces incluso a negar, la presencia de violencia en su relación.
Fuentes: Regroupement des maisons pour femmes victime de violence conjugale (2006), La violence conyugale… c’est quoi au juste? p.21; Institut national de santé publique (2001-2016), Media kit on domestic violencehttps://www.inspq.qc.ca/violence-conjugale/comprendre/de-quoi-parle-t-on#cycle
La espiral de violencia
Con el tiempo, el control del cónyuge aumentará. Los estallidos violentos se producirán con una frecuencia e intensidad crecientes, llegando en ocasiones al asesinato. Cuanto más se repite el ciclo, más fuerte es el dominio del hombre violento sobre la mujer. Poco a poco, ya no necesitará justificar sus actos; la víctima lo hará por sí misma. Al cabo de un tiempo, ya no habrá fase de «luna de miel», se pasará de la «justificación» a la «tensión», lo que no dejará respiro a la mujer.
Fuentes: Table de concertation en violence conyugale et agression à caractère sexuel de Laval (2011), Brisez le Silence, Laval, p.16
Tipos de violencia doméstica
Hay diferentes formas de violencia, y una persona puede ser víctima de una sola, o de varias al mismo tiempo. También es posible que ciertas formas de violencia desaparezcan y sean sustituidas por otras con el tiempo.
Violencia verbal: la más común
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- Insultos, sarcasmo;
- Comentarios degradantes y humillantes;
- Amenazas, chantaje;
- Órdenes brutales;
- Tono de voz amenazador, gritos, susurros.
Violencia psicológica: la más sutil
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- Crítica, culpa, devaluación;
- Denigración, humillación;
- Actitudes y comentarios despectivos;
- Indiferencia, negligencia;
- Silencios;
- Violencia contra objetos y animales.
Comentarios: El maltrato psicológico puede ser difícil de reconocer. No deja rastro en el cuerpo. Es difícil de detectar por quienes le rodean y por la víctima.
Destruye la autoestima y provoca sentimientos de confusión y duda.
Violencia física: la más publicitada
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- Empujones;
- Tirar del pelo;
- Muerde;
- Aprieta los brazos y el cuello;
- Lanzar objetos;
- Amenazar con un arma;
- Quemadura ;
- Huelga;
- Matar.
Nota: Esta es la forma de violencia más conocida y la más fácil de reconocer. Cuando se produce, la violencia psicológica o verbal suele estar ya presente en la relación de pareja.
Violencia sexual: el mayor tabú
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- Obligar a una mujer, acosándola, intimidándola, manipulándola o amedrentándola, a mantener relaciones sexuales con él o con otras personas;
- Imponer actos degradantes;
- Obligar a tu pareja a llevar ropa erótica o a ver material pornográfico;
- Denigrar el aspecto y las capacidades sexuales de una mujer, humillarla comparándola con otras mujeres;
- Animar a una mujer a mantener relaciones sexuales sin protección a pesar de los riesgos;
- Impedir que tu pareja utilice métodos anticonceptivos.
Nota: Obligar a tu pareja a mantener relaciones sexuales contigo es violación. La violación marital está tipificada como delito desde 1983.
Violencia económica: generalizada pero poco conocida
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- Exija que se rindan cuentas de todos los gastos;
- Impedir que la gente tenga su propia cuenta bancaria;
- Obligar a las personas a trabajar o impedir que lo hagan;
- Exigir la paga de alguien;
- Robar u obligar a alguien a robar o defraudar;
- Contraer deudas sin consentimiento;
- Crear dependencia financiera.
Nota: Esta forma de violencia reduce la autonomía de la mujer. Teme no poder dejar a su pareja, ya que se quedaría sin medios de subsistencia.
Violencia social
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- La pareja menosprecia constantemente a las personas que son importantes para ella;
- El marido denigra las aficiones, actividades y deportes de la mujer;
- Le impide mantener contacto telefónico o físico con su familia o amigos;
- Tiene prohibido recibir visitas;
- Comprueba sus correos electrónicos y llamadas telefónicas.
Nota: Esta forma de violencia se desarrolla gradualmente. Poco a poco, la mujer se encuentra sola y aislada.
Violencia espiritual
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- Adhesión forzosa a rituales o prácticas religiosas;
- Control de las prácticas religiosas;
- Denigración de las creencias.
Fuente: Table de concertation en violence conjugale et agression à caractère sexuel de Laval (2011), Brisez le Silence, Laval, p.11-13